“Todos deberían construir su red antes de necesitarla”.

Dave Delaney

Generar y cultivar contactos de mutuo beneficio es una actividad que ha estado presente a lo largo de toda la historia. Sin embargo, el día de hoy, en un ambiente de cambio, interconexión inmediata y comunicación constante, adquiere mayor relevancia. El Networking, como se le conoce actualmente, se convertido en una habilidad fundamental para abrirnos paso en nuestra vida laboral y crear oportunidades de crecimiento, de negocio y de mejora continua.

La base fundamental de hacer Networking está en la construcción de vínculos con personas que tarde o temprano podrán ser contactos importantes para nuestros objetivos profesionales. Esta diferencia es importante: muchas personas creen que el Networking es útil únicamente para labores de venta, pero no es así, ya que en la búsqueda de la mayor parte de nuestros objetivos intervendrán otras personas o podrán aportar elementos de valor insospechados. De esta forma, una red de contactos amplia y nutrida podrá ser aprovechada para diferentes fines, ya sea el crecimiento profesional, la búsqueda de nuevas oportunidades, el diseño o implementación de un proyecto, la puesta en marcha de un negocio propio, o cualquier otro.

El proceso de Networking es de alguna forma un proceso de venta personal. El establecer un vínculo con otra persona comienza por darse a conocer, presentarse y desarrollar confianza en tan sólo unos pocos segundos. Es por esto que resulta importante generar notoriedad y volverse una buena referencia para que tus contactos actuales te recomienden a otras personas y esta red comience a crecer gradualmente. A continuación, compartimos contigo algunas estrategias que te servirán para crear una red nutrida y sólida de contactos.

Pierde el miedo

Como su nombre lo indica, el generar contactos implica conectar con otras personas, encontrar puntos de interacción y adquirir información básica de otros. En esta actividad, el reto más importante de muchas personas está en vencer el miedo a hablar con desconocidos. Preguntas como ¿qué digo? ¿qué hago? ¿cómo empiezo? son recurrentes. La respuesta dependerá mucho del estilo de la persona y el contexto en que se desarrolla la actividad.

Aprovecha toda oportunidad

Todos los días interactuamos con personas desconocidas, pero pocas veces generamos contactos. Establecer vínculos con otras personas no es una actividad puramente profesional, ya que la podemos realizar en cualquier momento o tipo de evento, incluso en reuniones sociales o en lugares públicos. Atrévete a preguntar, ser curioso y en ocasiones un poco impertinente. Como todo, es una cuestión de práctica que involucra aprender de nuestros errores, mejorar y afinar nuestras habilidades. Recuerda que, al acercarte con otros, no tienes nada que perder y potencialmente tienes mucho que ganar.

Dar y recibir

Mencionábamos al inicio que, de cierta forma, el Networking es un proceso de venta personal. Es importante posicionarse como alguien que vale la pena conocer. Pregúntate, ¿qué puntos fuertes tengo que me permitirán vincularme mejor? Puede ser el tener una actitud y personalidad positiva y divertida, el crear una plática interesante, incluso la actividad que desarrollamos laboralmente. Lo importante es establecer un punto de partida y construir a partir de él la confianza de la otra persona, hacernos ver cómo un contacto útil de forma que sea posible en el futuro contar con la ayuda del otro. De esta forma, estaremos en posibilidad mutua de dar y recibir, solicitar y ofrecer ayuda.

Contactos de calidad

Como siempre, la calidad es mejor que la cantidad. Si bien al comienzo lo que buscamos es practicar y ganar habilidad, con el tiempo es importante volverse más selectos y cultivar aquellos contactos que tendrán mayor probabilidad de convertirse en una oportunidad futura. Después de establecido el vínculo, no dejes que se diluya o que se quede únicamente en un intercambio de tarjetas. Tómate el tiempo de hacer presencia, escribir un correo electrónico de agradecimiento que recapitule algunos puntos de la conversación que hayas tenido, por breve que haya sido. Crear una relación más estrecha te convierte a ti mismo en un contacto de calidad que valdrá la pena mantener.

Se honesto

El nombre del juego es confianza. Mantén una actitud abierta y preséntate de forma honesta y transparente. De nada sirve querer ensalzarse o aparentar más de lo que se es. Por el contrario, querer acaparar la atención o ser demasiado notorio evitará que las demás personas sientan la confianza para entablar una conversación contigo. Escucha más de lo que dices y asegúrate de que todo lo que dices esté respaldado por la verdad.

Utiliza tus redes sociales

Una excelente forma de ampliar tu red es a través de los conocidos virtuales. Crea un perfil sólido y escoge la red ideal para ti de acuerdo a tu personalidad y el tipo de contactos que deseas generar. En el mundo de las redes sociales es fácil perder el rumbo y mezclar tu vida social, intereses y objetivos profesionales. Procura mantener un perfil destinado a tu desarrollo profesional y otro para tu entretenimiento, fotos familiares y cuestiones más personales. Una vez más, se trata de dar una imagen de confianza y credibilidad, la cual únicamente se podrá construir siendo congruente entre lo que buscas y lo que muestras.

Expande tu círculo actual

Las redes más poderosas son aquellas que tenemos más cerca. Muchas veces las personas más próximas pueden pasar desapercibidas justamente por su cercanía, sin embargo, resulta especialmente útil apalancarnos en ellas para seguir cultivando la relación, encontrar nuevas formas de interacción, y conocer a otras personas. El tener un conocido mutuo puede hacer mucho más sencillo el establecimiento de la confianza inicial y darnos más seguridad para comenzar.

En el ámbito laboral, la ampliación de las redes internas resulta especialmente importante. Conocer personas de otras áreas con las que tenemos poca o ninguna relación aparente, ponerle cara a las personas que únicamente conocemos por teléfono o correo electrónico, hacer un esfuerzo por acercarnos a nuestros pares en otras regiones o matrices de la empresa. Todas estas actividades redundarán en ampliar nuestro círculo y serán útiles para abrir posibilidades que nos acerquen a nuestros objetivos.

Una persona con una sólida red de contactos interna puede adquirir mayor peso específico en la organización, ya que tendrá más herramientas para resolver las situaciones que se le presenten y podrá poner en marcha esfuerzos coordinados que para otras personas resultarían mucho más difíciles. Igualmente, esta red interna será clave para ganar visibilidad y ser considerado para nuevos proyectos, iniciativas u oportunidades de crecimiento.

Networking para crecer

Generar una red de contactos en todos los ámbitos es determinante para tu crecimiento. De más está mencionar que, actualmente, lograr objetivos y metas está estrechamente relacionado con los contactos y colaboraciones que puedes hacer con otras personas. Por ello te invitamos a abrir las posibilidades de darte a conocer, vencer las barreras que te impiden presentarte y crear vínculos que en el futuro te pueden ser de mucha ayuda. ¿Has iniciado ya tu red de contactos? ¿De qué manera empezaste a construirla? Déjanos saber lo que piensas en los comentarios, comparte con tus amigos y no te olvides de seguirnos en nuestras redes sociales y suscribirte a nuestro newsletter mensual. Escucha también nuestro podcast para profundizar en estos temas y continúa con nosotros esta conversación en cualquiera de los canales que tenemos para ti.